Mostrando postagens com marcador Juan Ramón Jiménez. Mostrar todas as postagens
Mostrando postagens com marcador Juan Ramón Jiménez. Mostrar todas as postagens

domingo, 26 de abril de 2015

Fim de inverno






Cantam, cantam,
Donde cantam os pássaros que cantam?
Chove e chove. Ainda as casas
Estão sem ramos verdes. Cantam, cantam
Os pássaros. E onde cantam
Os pássaros que cantam?
Não tenho pássaros na gaiola.
Não há crianças que os vendem. Cantam.
O vale está muito longe. Nada...
Nada. Eu não sei donde cantam (e cantam, cantam)
Os pássaros que cantam.

Juan Ramón Jiménez

domingo, 22 de setembro de 2013

¡Qué tristeza de olor de jazmín!








 

¡Qué tristeza de olor de jazmín! El verano
torna a encender las calles y a oscurecer las casas,
y, en las noches, regueros descendidos de estrellas
pesan sobre los ojos cargados de nostalgia.

En los balcones, a las altas horas, siguen
blancas mujeres mudas, que parecen fantasmas;
el río manda, a veces, una cansada brisa,
el ocaso, una música imposible y romántica.

La penumbra reluce de suspiros; el mundo
se viene, en un olvido mágico, a flor de alma;
y se cogen libélulas con las manos caídas,
y, entre constelaciones, la alta luna se estanca.

¡Qué tristeza de olor de jazmín! Los pianos
están abiertos; hay en todas partes miradas
calientes... Por el fondo de cada sombra azul,
se esfuma una visión apasionada y lánguida.


 Juan Ramón Jiménez

Canción de invierno




Cantan. Cantan.
¿Dónde cantan los pájaros que cantan?

Ha llovido. Aún las ramas
están sin hojas nuevas. Cantan. Cantan
los pájaros. ¿En dónde cantan
los pájaros que cantan?

No tengo pájaros en jaulas.
No hay niños que los vendan. Cantan.
El valle está muy lejos. Nada...

Yo no sé dónde cantan
los pájaros -cantan, cantan-
los pájaros que cantan.


 Juan Ramón Jiménez

Trascielo del cielo azul




 



¡Qué miedo el azul del cielo!
¡Negro!
¡Negro de día, en agosto!
¡Qué miedo!
¡Qué espanto en la siesta azul!
¡Negro!
¡Negro en las rosas y el río!
¡Qué miedo!
¡Negro, de día, en mí tierra
-¡negro!-
sobre las paredes blancas!
¡ Qué miedo!


Juan Ramón Jiménez